Desprendimiento de la retina es una enfermedad que afecta uno o ambos ojos. En efecto, la retina es una capa de tejido que tiene lugar en la parte posterior del ojo. Se encarga de percibir la luz y transformar las imágenes al cerebro.
Al respecto al desprendimiento de la retina es el término que refleja a la separación de la retina de su posición normal a causa de un desgarro, acumulándose un líquido que queda entre la retina y el epitelio pigmentario.
A causa de esa separación, la retina va a quedarse sin nutrición y riego sanguíneo. El resultado va a ser diferentes molestias que pueden alcanzar hasta la pérdida de visión.
Efectivamente, el desprendimiento de la retina puede afectar a todas las personas de diferentes edades, pero, en la mayoría de los casos, afecta a las personas mayores de 40 años de edad.

Las causas del desprendimiento de la retina:

Al aparecer un desprendimiento de la retina, habitualmente, hace falta la existencia de un desgarro en la retina o una degeneración de un vítreo licuado.
En lo más frecuente, el desprendimiento de la retina tiene lugar en los ojos miopes. Pues, 40% de pacientes que tienen este problema son personas con miopía. Esto se explica por la frecuencia de los desgarros retinianos y la degeneración vítrea entre los miopes.
También, la existencia del desprendimiento de la retina en la historia familiar puede ser un factor de riesgo, lo mismo para el sometimiento a una cirugía previa de catarata.
Por otro lado, el desprendimiento de la retina puede ser causado por: inflamación, traumatismos o envejecimiento normal del ojo.

Síntomas del desprendimiento de la retina

Son diferentes los síntomas que pueden indicar la presencia de un desprendimiento de la retina. Ya que, dependen del grado de evolución del mismo.

• La aparición de lo que se llama moscas volantes.
• La aparición de destellos luminosos, especialmente si aparecen repetitivamente en el mismo campo visual.
• La aparición de una cortina oscura que tapa la visión cada vez más.
• La visión borrosa y distorsionada de las imágenes.

Tipos de desprendimiento de la retina

Existen 3 tipos básicos de desprendimiento de la retina.

• Desprendimiento de la retina regmatógeneo que es el tipo más frecuente. Viene asociado con una rotura en la retina. En este caso, el humor vítreo pasa al espacio sub-retiniano. Lo habitual es que ocurre en las personas con miopía y que sufren traumatismo o que han sometido a una cirugía intraocular.
• Desprendimiento de la retina traccional que consiste en la producción de una tracción del humor vítreo sobre la retina. Surge por la presencia de una patología al nivel de la interface del vítreo. Las personas que sufren retinopatía diabética tienen un mayor factor de riesgo.
• Desprendimiento de retina exudativo o seroso que consiste en la filtración de liquido por debajo de la retina. Este tipo puede prevenirse de otras enfermedades como infecciones, tumores o anomalías en los vasos sanguíneos. Es el tipo menos frecuente

El tratamiento del desprendimiento de la retina:

Después de hacer el diagnostico necesario para asegurarse del desprendimiento de la retina, el tratamiento es siempre quirúrgico.  La técnica utilizada suele dependerse de la fase del desprendimiento y será precisada por el oftalmólogo. Ya que existen varios métodos.
Durante las fases iníciales, la fotocoagulación con laser puede ser útil y eficaz. Pues, al detectar agujeros en la retina, se aplica el laser para evitar el desprendimiento de la retina.
Este procedimiento se debe ser actuado por un especialista experto y en el momento adecuado. Consiste en eliminar los vasos sanguíneos anormales de la retina. Así que el éxito del tratamiento dependerá del grado de la gravedad de cada caso.
Luego, se puede utilizar la técnica llamada retinopexia neumática que consiste en la colocación de una burbuja de gas en el interior del ojo con el objetivo de empujar la retina para que se coloque correctamente en su lugar adecuado.
Durante los días siguientes, el paciente debe mantener su cabeza en la posición adecuada recomendada por el oftalmólogo. La burbuja de gas permanece en el lugar correcto produciendo el líquido que llena el ojo. Gradualmente, este líquido sustituirá a la burbuja de gas.
La técnica siguiente es la vitrectomía que consiste en el reemplazo del vítreo por una burbuja de aire, gas o aceite. La burbuja va a empujar la retina colocándola en su lugar. Si se utiliza una burbuja de aceite, el oftalmólogo le extraerá después de algunos meses.
Además, la cirugía escleral es una técnica que permite recolocar la retina mediante el cierre a partir del exterior del agujero retiniano que ha causado el desprendimiento. El procedimiento consiste en suturar elementos de silicona en la pared de la esclera.
Sin embargo, existen otros tipos de cirugías que se usan para tratar el desprendimiento de vítreo. La selección de la técnica adecuada se hace dependiendo del caso de cada paciente, la gravedad de su situación y su evolución.

Después del tratamiento del desprendimiento de la retina

Una vez hecho el tratamiento quirúrgico del desprendimiento de la retina, el paciente puede sentirse algunas molestias que duran algunos días o semanas después de la cirugía. Así que para sentirse mejor, es necesario utilizar los analgésicos recomendados por el oftalmólogo.
Sin embargo, el ojo debe quedarse protegido por un parche después de la cirugía.
Por supuesto, un periodo de descanso es necesario después de la cirugía. Pues, hay que ser menos activo durante las primeras semanas postoperatorias. Así que, se debe seguir las instrucciones del médico para garantizar la curación y la sanidad del ojo.
Durante el periodo postoperatorio, es posible ver moscas volantes y luces parpadeantes. Unas semanas después, la visión empezará a mejorarse y la retina se cura poco a poco.

Conclusión

La retina es una parte esencial del globo ocular que tiene un papel fundamental en el funcionamiento del campo de visión.
El desprendimiento de la retina se produce a causa de la separación de la retina neurosensorial del epitelio pigmentario. Esta separación provoca la acumulación del líquido que queda entre ambas partes lo que causa diferentes molestias en el campo visual. En efecto, es más frecuente en personas miopes.