Exfoliación química: el tratamiento estético

Exfoliación química llamada también peeling químico es un tratamiento estético que se realiza con el objetivo de rejuvenecer la piel. Consiste en tratar algunos problemas de la piel con la finalidad de mejorar su calidad, y de ello, su apariencia.
En efecto, la exfoliación es un procedimiento necesario para la piel. Pues, promueve la regeneración de las células de la piel. Después de la exfoliación, la piel se vuelve más receptiva a los productos usados, además de ser limpia y lista para producir más colágeno y elastina. Por consiguiente, la exfoliación permite suavizar la textura de la piel y mejorar su estado.
De hecho, hay dos tipos de exfoliación de piel. El primer tipo es la exfoliación física, y trata de hacerla manualmente con los productos de “arena, azúcar…”. Se hace por medio de fricción, y se realiza en la capa más superficial de la piel. El segundo tipo es la exfoliación química que suele ser más eficaz por usar productos que contienen ingredientes exfoliantes.
La exfoliación química consiste en aplicar una solución química sobre la piel para extraer las capas superiores. De ello, las capas de piel que van a crecerse nuevamente, serán de calidad mejor. Por consiguiente, la piel será más lisa.
Este tratamiento se realiza para disminuir las arrugas, los cambios de color en la piel y la cicatrización. Se aplica frecuentemente en el rostro y puede ser hecha sola o combinada con otros tratamientos. Así que se puede realizar en diferentes profundidades

Tipos de exfoliación química

El tipo de exfoliación química se elige según los problemas de la piel que se desea resolver.
Exfoliación química suave: consiste en la extirpación de la capa exterior de la piel. Se utiliza para tratar las arrugas finas, la sequedad de la piel y cicatrices del acné.
Exfoliación química media: consiste en retirar las células de la parte superior de la capa media de la piel. El objetivo de su uso es retirar las arrugas, cicatrización por acné y la desigualdad del tono de la piel. A veces, es necesario repetir el procedimiento para alcanzar al resultado deseado.
Exfoliación química profunda: consiste en eliminar las células más profundas de la piel. Se hace para eliminar los tumores precancerosos o las arrugas más profundas. De hecho, no es posible hacerlo que una sola vez.
Antes de empezar a usar la exfoliación química, es necesario saber el tipo de su piel para identificar los problemas a tratar.

Tipo de piel apto para la exfoliación química

El tipo de piel perfecto para la exfoliación química es la piel grasa con los poros abiertos. Pues, es la que más se beneficia de esta técnica por ser más gruesa y glándulas sebáceas más grandes.
Por otra parte, si la piel es muy sensible y/o con acné, es aconsejable limitar el uso de los exfoliantes.
Sin embargo, los demás tipos de piel pueden ser aptos para la exfoliación química si se elige la formulación perfecta para cada caso, eso lo precisa los especialistas de estética dependiendo de las características del rostro de cada persona. Ya que, todas las pieles pueden beneficiares de la exfoliación química, solo es necesario tener precaución al elegir los ácidos a utilizar.

Exfoliación química

Riesgos y posibles complicaciones de la exfoliación química

Cualquier tratamiento estético tiene sus beneficios pero también sus riesgos. De hecho, la exfoliación química puede presentar algunos efectos secundarios.

  • Cambio en el tono del color: consiste en la posibilidad de cambiar el tono del color natural de la piel que puede ser temporal o permanente. Esto puede ocurrirse en determinados tipos de pieles que pueden ser más oscuras o más claras de lo normal.
  • La cicatrización: en algunos casos, la exfoliación química puede dejar cicatrices en el rostro, sobre todo en la parte baja. Para eliminarlas, se suele usar antibióticos y esteroides.
  • Enrojecimiento: el proceso normal del peeling químico causa enrojecimiento de la zona tratada de la piel del rostro. Al realizar una exfoliación química media o profunda, el enrojecimiento puede durar algunos meses.
  • Infección: La exfoliación química puede causar una infección que puede provocar el herpes labial. Esto deriva de la exposición de la piel a los espacios bacterianos o el uso del maquillaje antes de la curación completa.

Antes de la exfoliación química

Antes de realizar la exfoliación química, se debe hacer una revisión de la historia clínica del paciente para chequear su salud general, y asegurarse que no tiene nada que puede causar complicaciones.
Luego, se debe hablar con su médico de las expectativas del tratamiento y los resultados esperados para que todo esté claro y bien organizado. También, se debe hablar de los riesgos y las complicaciones posibles para que el paciente sea responsable de su decisión.
Después, el médico recomienda una serie de instrucciones a seguir. Va a recetar medicamentos, cremas. Así que va a darse un conjunto de consejos como evitar la exposición directa al sol sin protección y evitar ciertas actividades y algunos productos.

Después de la exfoliación química

Después de la exfoliación química, es normal que la piel se queda enrojecida e hinchada. También, se puede quedarse seca y ligeramente irritada. En efecto, el estado de la piel después del tratamiento depende del tipo de la exfoliación química aplicada.
Por lo general, se debe evitar la exposición al sol y sobre todo tocarse el rostro para mantener la piel limpia.
En cuanto a los resultados, la exfoliación química ligera la textura de la piel y el tono de su color. Los resultados suelen ser satisfactorios al respecto a su eficacia en eliminar las arrugas y las líneas de expresión.

Conclusión

La exfoliación química es un tratamiento de estética facial que permite mejorar la apariencia de la piel y su calidad quitando las células muertas y animando la regeneración de nuevas células.

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